Ansiedad.




Sofocación, alteración, exaltación; parte de ese  incontrolable malestar localizado
Que  se apodera de todo lo que me rodea.
Me someto como un masoquista se somete ante el látigo que arrastra placer por la piel.
Inquietud, una intensa excitación y una extrema inseguridad me controlan
Sobrevivir la cuesta arriba que me imponen los síntomas una y otra vez
Se vuelve una tarea difícil.
Me despierto temprano por la mañana tratando de no enloquecer
No estoy bien, no estoy seguro ni mucho más aun satisfecho de todo lo hecho hasta el momento.
Pero sigo adelante, sobrevivo a la picazón que se mueve desde los dedos hasta llegar a mi garganta para cortarme la respiración.
Sofocación, alteración, exaltación.
Pánico locura y desesperación.
Como si encontrara un canal, la salida ante la manifestación más incontrolable brota  dentro de mi cabeza.
Nunca fui muy amigo de  esas situaciones donde las cosas escapan a mi observación
El deseo de tener el volante que evita que este auto se termine de estrellar me corta la respiración
Ciega la vista y supera toda mi capacidad de movimiento
Pierdo el control queriendo controlarlo todo
Esa es la ansiedad diaria, la lucha constante  con la que pierdo la cabeza

Comentarios

Entradas populares de este blog

Desde el equilibrio al exilio

Empezamos con los ciclos semanales

Choke